El gobierno de Dina Boluarte anunció la ruptura de relaciones diplomáticas tras conocerse que Chávez se encuentra bajo resguardo en la sede diplomática, apenas dos meses después de salir en libertad para enfrentar en condición de procesada el juicio en su contra por presunta complicidad en el fallido intento de golpe de Estado de Castillo, ocurrido en diciembre de 2022.
De Tacna a la cúpula del poder

De origen aimara y nacida en Tacna, región fronteriza con Chile, Chávez es abogada de profesión y alcanzó notoriedad tras ser elegida congresista en las elecciones de 2021 con el partido Perú Libre, de tendencia marxista-leninista, el mismo que llevó a Castillo a la Presidencia.
Su ascenso político fue vertiginoso. En poco más de un año pasó de ser ministra de Trabajo a titular de Cultura, y finalmente fue nombrada presidenta del Consejo de Ministros. Su gestión como jefa de gabinete fue breve: apenas dos semanas antes del fallido golpe de Estado que precipitó la caída del gobierno de Castillo.
La lealtad a Castillo y las acusaciones
El 7 de diciembre de 2022, Pedro Castillo apareció en cadena nacional anunciando el cierre del Congreso y la intervención del Poder Judicial, un acto que fue calificado como intento de golpe. Detrás de las cámaras, según testigos, estaba Betssy Chávez, aunque ella ha sostenido reiteradamente que desconocía el contenido del mensaje presidencial.
Tras la detención de Castillo, Chávez fue arrestada en 2023 e internada en una prisión de mujeres en Lima. Durante su encarcelamiento denunció abusos y emprendió huelgas de hambre hasta que el Tribunal Constitucional declaró que su detención había sido arbitraria.

En marzo de 2025, fue liberada bajo medidas restrictivas y debía acudir tres veces por semana a las audiencias judiciales. Sin embargo, el Juzgado Supremo de Investigación Preparatoria le impuso una prohibición de salida del país por 10 meses, al considerar que existía “sospecha suficiente” de fuga.
De acusada a asilada política

Aunque su abogado, Raúl Noblecilla, aseguró que Chávez no tenía intención de abandonar Perú y que incluso planeaba postular a las elecciones generales del próximo año, su repentina ausencia en las últimas audiencias despertó sospechas.
Este lunes, se confirmó que la ex primera ministra se encuentra asilada en la Embajada de México, un hecho que ha desatado una crisis diplomática. La Cancillería peruana calificó la situación como una “intervención inaceptable” en los asuntos internos del país y anunció la ruptura inmediata de relaciones con el gobierno mexicano.
Por su parte, la Secretaría de Relaciones Exteriores de México ha mantenido discreción sobre el caso, aunque fuentes diplomáticas señalaron que el asilo fue concedido conforme al derecho internacional.
Pese a los señalamientos, Betssy Chávez ha mantenido un discurso desafiante. En una entrevista reciente, afirmó que “en los próximos años será presidenta del Perú”, mostrando su intención de continuar en la vida política pese a los procesos judiciales en su contra.
