Guanajuato, Gto.- Uno de los espacios más emblemáticos de Guanajuato capital es, sin duda, el Jardín Embajadoras. Se trata de un sitio destinado a la convivencia, el intercambio comercial y la relajación. Al centro de este lugar se ubica uno de los monumentos más hermosos de la ciudad: la Fuente de la Libertad, la cual, aunque muchos no lo saben, está emparentada con la Plaza de la Paz y con el Teatro Juárez.
Esta fuente es obra de Jesús Fructuoso Contreras, uno de los escultores mexicanos más representativos del siglo XIX, quien también es autor de la escultura de La Mona de la Paz y de los leones que se encuentran al frente del Teatro Juárez.
La base de la fuente y del monumento está labrada en cantera. La escultura presenta cuatro caras de leones orientadas hacia los cuatro puntos cardinales y toda la columna cuenta con detalles tallados de gran belleza. La remata la estatua de la Libertad, que lleva en la mano izquierda la Constitución de 1857 y las Leyes de Reforma de 1860.
La fuente fue inaugurada en 1895, poco después de que se embovedara el río para ampliar el Paseo de la Presa, lugar donde fue colocada originalmente. Se encontraba justo frente a donde hoy se localiza el Palacio de Gobierno, inaugurado en 1953. Con la construcción de este edificio llegó también la estatua del general Sóstenes Rocha, que sustituyó a la fuente, la cual fue trasladada a su ubicación actual. Originalmente, el monumento contaba con cisnes metálicos que con el paso de los años desaparecieron de manera misteriosa.
Desde hace varios años su estado es deplorable
Lamentablemente, desde hace varios años su estado es deplorable. La cantera luce desgastada y resquebrajada, y faltan ya varios fragmentos tanto en la base como en la columna.
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Además, la fuente se encuentra vandalizada con múltiples grafitis realizados con marcadores y aerosoles. A decir de vecinos y transeúntes, también está fuera de servicio desde hace años.
“Tiene muchos años que no funciona, ya no me acuerdo la última vez que la vi trabajando. Creo que por los leones salía agua por la boca, pero ya no me acuerdo”, comentó una transeúnte.