Dice bien el dicho, no hay fecha que no llegue ni plazo que no se cumpla. El pasado primero de octubre la Dra. Claudia Sheinbaum Pardo, de 62 años, tomó posesión ante el Congreso de la Unión como la primer presidenta constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, hecho por demás histórico al ser la primer mujer en la historia de nuestro país en los más de 200 años de historia como nación independiente en alcanzar dicha posición, en una emotiva ceremonia en donde, en un acto simbólico y protocolario recibió la banda presidencial de manos de Ifigenia Martínez (el presidente saliente no puede colocársela a quien lo sucede) de 94 años, quien actualmente se desempeña como presidenta de la Cámara de Diputados además de haber sido académica, primera en obtener una maestría en economía en Harvard, diplomática, luchadora de causas de izquierda, cofundadora del PRD y MORENA, defensora de la paridad de género desde hace seis décadas, así como haber sido la primer mujer en ocupar un escaño en la Cámara de Senadores en 1988 por la Ciudad de México.
Durante su discurso de toma de posesión, acompañada de los miembros que integran su gabinete, la presidenta Sheinbaum se refirió al rol histórico de las mujeres en donde recalcó “no llego sola, llegamos todas”, agradecer y enaltecer la figura de su predecesor, Andrés Manuel López Obrador, asegurando la continuidad de diferentes programas de gobierno, así como hacer hincapié en diferentes cursos de acción que su gobierno implementará en materia de inversión, economía, seguridad, desarrollo social, entre otros.
Una vez finalizado el acto, la presidenta Sheinbaum se dirigió a Palacio Presidencial, donde por cierto al igual que su predecesor será su lugar de residencia durante los próximos seis años, degustando una comida con los mandatarios y representantes internacionales que acudieron a su toma de posesión, para después llevar a cabo un acto multitudinario teniendo como escenario el zócalo capitalino en donde recibió, de manos de las representantes de los 70 pueblos indígenas y afromexicanos, el bastón de mando, el cual no sólo reivindica la importancia de los pueblos originarios indígenas en nuestro país, sino también reconocer, en la figura de la presidenta, a su soberana y representante política.
Momentos después, la Dra. Sheinbaum dirigió un mensaje en el que hizo alusión a la continuidad del movimiento iniciado por su predecesor, siendo éste nuevo ejercicio de gobierno el segundo piso de la cuarta transformación, al haber sido la primera la independencia, la segunda la Reforma, la tercera la Revolución Mexicana y la cuarta la iniciada por el ex presidente Obrador, continuando su discurso reivindicando nuevamente el papel de las mujeres, así como presentar 100 puntos que guiarán a la nueva administración, entre los que destacan: el seguimiento al caso Ayotzinapa; la continuidad de la recién aprobada reforma judicial; reforma al sistema electoral; no reelección en puestos de elección popular; garantizar todos los programas del bienestar; becas a estudiantes de preescolar, primaria y secundaria que cursen sus estudios en escuelas públicas; establecer un programa de atención médica casa por casa a adultos mayores; consolidación de la educación media creando más preparatorias y educación superior a través del fortalecimiento de las Universidades Benito Juárez y volver nacionales las Universidades Rosario Castellanos y de la Salud; consolidación el programa espacial mexicano; apoyos a la cultura y artistas; acceso efectivo al derecho a la salud, garantizando cirugías, vacunas y tratamientos; acceso a la vivienda; programa masivo de escrituración; construcción de más unidades médicas; continuidad en el aumento al salario mínimo; garantizar la soberanía alimentaria; impulso a la energías renovables; impulso y desarrollo de la red de trenes de carga y pasajeros; garantizar el acceso al agua y al internet, este último como un derecho básico; contar con un país más seguro disminuyendo los delitos de alto impacto, atención a las causas del delito, así como el fortalecimiento de la Guardia Nacional, inteligencia, investigación y coordinación, entre muchas otras.
Sin duda 100 puntos que acompañarán la gestión de la presidenta Sheinbaum durante los próximos seis años, mismos que representan toda una suerte de retos, tanto de procuración de fondos para implementarlos, así como de voluntad política para mantenerlos y que se encontrarán bajo el escrutinio de la opinión pública y la oposición. Estos 100 puntos, que representan para un amplio sector social la esperanza de un futuro mejor en términos económicos, educativos, sanitarios, securitarios, culturales, políticos, administrativos y de derechos, entre otros, se han visto ensombrecidos en este arranque de gobierno por tres hechos. El primero, la votación de ocho contra tres de los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, a través de la cual se plantea analizar la procedencia de impugnación de jueces y magistrados en contra de la reforma constitucional al poder judicial; la segunda, la muerte de seis migrantes de Honduras, El Salvador, Perú y Egipto, en Chiapas, a manos de dos militares en un evento por demás confuso que en nada abona a la presentación en ciernes de la estrategia de seguridad pública y la discusión en cuanto al tema de si nos encontramos frente a una militarización o no de la misma; y la tercera, la anunciada visita de la presidenta al puerto de Acapulco, Guerrero, azotado por la tormenta tropical John, la cual, a decir de lo habitantes, no pasó de ser una reunión con la gobernadora y autoridades de seguridad, estatales y municipales para la generación de un censo, evaluación de daños y políticas a seguir, más allá de lo que se habría esperado de lo anunciado como gobierno de territorio y no de escritorio.
Más allá de las vicisitudes que lo anterior pueda o no significar, lo cierto es que ningún cambio de gobierno ha estado exento de comenzar con diferentes tribulaciones que pueden y deben ser atendidas a la brevedad, y durante los siguientes seis años, como se espera de un gobierno emanado de una coyuntura histórica tan importante como la que nos ha tocado presenciar.
100 pasos con ella. Nos tocará acompañarla, contribuir, analizar y señalar lo conducente. Por el bien de nuestro país, esperamos que se desarrollen de la mejor manera. Estaremos atentos.
@ottorenecaceres
politicaparatodos10@gmail.com
