Ciudad de México, México.- Tras casi un mes de búsqueda ininterrumpida, las autoridades peruanas y rescatistas confirmaron este domingo el hallazgo de los cuerpos sin vida de tres montañistas desaparecidos desde el pasado 29 de mayo en el nevado Artesonraju, ubicado en la imponente Cordillera Blanca, en la región Áncash.

Hallan sin vida a montañistas desaparecidos en el nevado Artesonraju tras avalancha en la Cordillera Blanca de los Andes, región Áncash, Perú (Foto: Twitter)

Los fallecidos fueron identificados como Hommer Pretel Alonzo, de 34 años, y Jesús Picón Huerta, de 31, ambos estudiantes del Centro de Estudios de Alta Montaña (CEAM) de Huaraz, y el fotógrafo y alpinista brasileño Edson Vandeira Costa, de 36 años. Según informaron las autoridades, los tres habrían perdido la vida a causa de una avalancha mientras descendían por la peligrosa cara noroeste del nevado, a más de 6,000 metros de altitud.

La noticia fue confirmada por la Asociación de Guías de Montaña del Perú (AGMP), que lideró el operativo de búsqueda junto a voluntarios, especialistas internacionales y con el respaldo de instituciones estatales.

“El uso de drones fue clave para localizar los cuerpos en una zona sumamente inestable, con crestas afiladas y paredes de hielo”, explicó Rafael Figueroa, presidente de la AGMP. “Las condiciones climáticas extremas nos pusieron al límite, pero el compromiso de todos permitió cerrar este ciclo con respeto y humanidad”.

Un ascenso que terminó en tragedia

Hallan sin vida a montañistas desaparecidos en el nevado Artesonraju tras avalancha en la Cordillera Blanca de los Andes, región Áncash, Perú (Foto: Twitter)

Los tres montañistas iniciaron la expedición al Artesonraju —una cumbre de 6,025 metros famosa por su silueta triangular y su alta exigencia técnica— a fines de mayo. El CEAM alertó a las autoridades tras no recibir noticias de ellos en la fecha prevista de regreso. La búsqueda se activó el 2 de junio.

En los días posteriores, se encontraron indicios preocupantes: carpas abandonadas en el campamento base y rastros junto a una zona de deslizamiento de nieve. Sin embargo, fuertes nevadas y vientos obligaron a suspender repetidamente las labores de rescate.

El operativo fue reforzado con helicópteros de la Fuerza Aérea del Perú, personal de la Policía Nacional y la participación de alpinistas internacionales, entre ellos los reconocidos hermanos españoles Iker y Eneko Pou. Finalmente, el 22 de junio, un dron de la AGMP captó imágenes de los tres cuerpos a unos 5,800 metros de altitud.

“Fue un momento agridulce”, relató Figueroa. “Aliviamos el dolor de las familias al darles certezas, pero también enfrentamos una pérdida irreparable para la comunidad montañista”.

Una operación de rescate en condiciones extremas

Hallan sin vida a montañistas desaparecidos en el nevado Artesonraju tras avalancha en la Cordillera Blanca de los Andes, región Áncash, Perú (Foto: Twitter)

La extracción de los cuerpos aún representa un desafío mayor. Las autoridades coordinan ahora un nuevo operativo que implicará alta especialización y condiciones climáticas favorables, dado el riesgo de nuevas avalanchas y la inestabilidad del terreno.

En un comunicado oficial, la AGMP instó a la comunidad de alpinistas a extremar precauciones en rutas como la del Artesonraju, conocida por su historial de accidentes fatales.

“Este nevado es un ícono del montañismo andino, pero también uno de los más peligrosos”, advirtió Figueroa. “Es imprescindible respetar las condiciones meteorológicas, seguir rutas seguras y contar con guías certificados”.

¿Quiénes eran las víctimas?

Hommer Pretel, natural de Huaraz, era considerado una joven promesa del montañismo peruano, con experiencia en nevados emblemáticos como el Huascarán. Jesús Picón, por su parte, destacaba por su formación técnica en rescate glaciar y era muy activo en iniciativas de educación en montaña.

El brasileño Edson Vandeira Costa era un experimentado alpinista y fotógrafo profesional, colaborador de medios como National Geographic. Su pasión por los Andes lo había llevado a documentar expediciones en Perú, Bolivia y Chile.

Desde Brasil, su madre, Yenira Vandeira, expresó su dolor en una emotiva declaración:

“Mi hijo amaba las montañas, eran su vida. Si es su voluntad, que descanse allí, en el lugar que lo hacía feliz”.

Las familias de los montañistas peruanos agradecieron los esfuerzos desplegados durante el mes de búsqueda, aunque pidieron privacidad para vivir su duelo en silencio.