Salamanca, Gto.– El presidente municipal de Salamanca César Prieto Gallardo presentó ante los senadores Kikis Magaña, Emmanuel Reyes Carmona, Adán Augusto López Hernández, Félix Salgado Macedonio, Malú Micher, Manuel Velasco Coello, entre otros, un proyecto para que Salamanca y otros municipios vendan el agua residual doméstica —previamente tratada— a Petróleos Mexicanos (Pemex), para los procesos de refinado del crudo en la refinería “Ing. Antonio M. Amor”. El objetivo es que se deje de extraer agua del subsuelo y se evite el abatimiento de los mantos acuíferos.
“Les explicamos lo que implica que la refinería ‘Ing. Antonio M. Amor’ de Pemex extraiga 700 litros por segundo; en su momento ya se le planteó este proyecto a la presidenta Claudia Sheinbaum. Salamanca apenas tiene la posibilidad de aportar entre 250 y 300 litros por segundo, por lo que se requiere un flujo adicional. Se tiene que valorar qué municipio puede aportar lo que falta, y en este caso podría ser Irapuato”, explicó.
Actualmente, existe un convenio para entregarle agua cruda a Pemex a través del organismo operador del agua, el cual deberá mantenerse mientras se proyecta esta nueva propuesta para entregar el volumen necesario con agua tratada, con el fin de sustituir el uso de agua del subsuelo.
Prieto Gallardo destacó que se está a la espera de que los especialistas de Pemex indiquen cuál es la calidad del agua que requieren para así plantear un proyecto ejecutivo acorde a las especificaciones técnicas de la empresa.
“Tenemos que conocer los requerimientos de Pemex, por eso es importante generar e impulsar este tipo de proyectos. En su momento, se deberá valorar su viabilidad y trabajarlo de la mano con Pemex, siendo el organismo del agua el responsable de darle seguimiento”, señaló.
El presidente municipal subrayó que los beneficios de que Pemex le compre agua tratada al municipio serían múltiples: dejarían de extraerse alrededor de 700 litros por segundo de agua de pozo profundo, y además representaría un ahorro económico para la paraestatal, ya que actualmente paga a la CONAGUA cerca de 25 pesos por metro cúbico de agua extraída del subsuelo.
“Al comprar agua tratada, el costo sería mucho menor. Sería un ahorro para Pemex, pero lo principal es que dejaría de extraer agua de los mantos acuíferos”, insistió.
La intención es que Pemex cancele todos los pozos que actualmente opera para extraer agua para sus procesos, y en caso de requerir alguno, que sea el mínimo indispensable.
“Es un proyecto complejo, que afortunadamente los senadores están de acuerdo en impulsar”, agregó.
Prieto Gallardo mencionó que este proyecto se ha planteado desde hace años y traería beneficios ecológicos para Salamanca, ahorro para Pemex y beneficios económicos para el organismo operador CMAPAS, que podría destinar los recursos obtenidos a ampliar las redes de agua potable y alcantarillado, y brindar un mejor servicio a la ciudadanía.
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“Pero lo más importante es garantizar el agua a nuestras nuevas generaciones. Ahora que estamos enfrentando una situación complicada, Salamanca aún tiene agua, pero no hay que desperdiciarla. Hay que aprovechar el agua residual del consumo doméstico, tratarla, y asegurarnos de que tenga la calidad necesaria para que Pemex deje de extraer agua del subsuelo”, concluyó.
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