Ciudad de México, México.– Un tribunal federal de apelaciones de Estados Unidos dictaminó este viernes que el expresidente Donald Trump no tenía facultades legales para imponer aranceles a decenas de países bajo la Ley de Poderes Económicos de Emergencia Internacional (IEEPA, por sus siglas en inglés). Aunque consideró que la mayoría de estas medidas se encuentran fuera del marco legal, la corte decidió mantenerlas vigentes temporalmente para dar margen a una posible apelación ante la Corte Suprema.

Tribunal de EE.UU. declara ilegales aranceles de Trump, pero los mantiene vigentes en espera de una posible revisión en la Corte Suprema (Foto: Twitter)

La decisión del Tribunal de Apelaciones del Circuito Federal confirmó en gran parte un fallo previo del Tribunal de Comercio Internacional, que había concluido que Trump utilizó indebidamente la IEEPA para justificar tarifas punitivas sobre naciones como China, Canadá, México e India. Sin embargo, los jueces señalaron que el tribunal inferior deberá reconsiderar si el bloqueo a los aranceles debe aplicarse de manera generalizada o únicamente a las partes que presentaron la demanda.

“El estatuto otorga al Presidente una autoridad significativa para responder a una emergencia nacional declarada, pero ninguna de estas medidas incluye explícitamente el poder de imponer aranceles, obligaciones o impuestos”, destacó la resolución.

¿Qué aranceles fueron afectados?

El fallo se refiere principalmente a los aranceles aplicados por Trump bajo la IEEPA, entre ellos los dirigidos a productos provenientes de China, así como las tarifas adicionales impuestas a Canadá, México e India.

Tribunal de EE.UU. declara ilegales aranceles de Trump, pero los mantiene vigentes en espera de una posible revisión en la Corte Suprema (Foto: Twitter)

En contraste, las medidas sobre acero, automóviles y otros bienes importados permanecen fuera de este dictamen, dado que fueron justificadas bajo otras leyes comerciales estadounidenses que sí contemplan expresamente la facultad presidencial de establecer tarifas.

Los cuestionamientos legales parten del argumento de que Trump usó la IEEPA para evadir la autorización del Congreso y presionar a sus socios comerciales en negociaciones, en lugar de responder a una emergencia nacional legítima, como establece la norma. El tribunal subrayó que, al redactar la ley, el Congreso nunca incluyó los términos “arancel”, “derecho” o “impuesto”, a diferencia de otros marcos legales donde sí se otorgó esa atribución presidencial de manera clara.

¿Qué pasará con los aranceles de Trump?

Tribunal de EE.UU. declara ilegales aranceles de Trump, pero los mantiene vigentes en espera de una posible revisión en la Corte Suprema (Foto: Twitter)

La decisión, adoptada por siete votos contra cuatro, prolonga la incertidumbre sobre el futuro de los aranceles. Se anticipa que el caso llegue a la Corte Suprema, que en ocasiones previas ha respaldado de manera amplia las decisiones de Trump en política comercial. No obstante, la Casa Blanca también podría optar por permitir que el Tribunal de Comercio Internacional revise nuevamente el asunto antes de escalarlo a la máxima instancia judicial.

Un eventual fallo definitivo que anule los aranceles podría desestabilizar los acuerdos comerciales que Trump promovió como victorias de su administración, además de abrir la puerta a múltiples demandas de reembolso por los derechos ya cobrados a empresas importadoras.

La reacción de Trump

Fiel a su estilo, Trump reaccionó casi de inmediato a través de su red Truth Social. “¡TODOS LOS ARANCELES SIGUEN VIGENTES!”, escribió, asegurando que el fallo era producto de un tribunal “altamente partidista” y anticipando que “al final, Estados Unidos ganará”.

El expresidente advirtió que eliminar estas tarifas sería “un desastre total para el país”, al tiempo que insistió en que se trata de una herramienta fundamental para proteger la economía estadounidense.

Mientras tanto, billones de dólares en comercio global permanecen en juego, a la espera de una resolución final que podría redefinir no solo la política comercial de Trump, sino también los límites del poder ejecutivo en materia de economía internacional.