A 11 años de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, los estudiantes de esa escuela normal rural y de otras de distintos estados de la República prendieron fuego a tres camionetas en los accesos al Palacio de Justicia de Iguala y lanzaron petardos al interior de esas instalaciones.

Los estudiantes, con los rostros cubiertos, llegaron a las instalaciones del Palacio de Justicia para reclamar el hecho de que no fueran entregadas a las autoridades federales las cámaras de video vigilancia, que aseguran tenían material trascendental que aportaría datos de prueba de quien o quienes se llevaron a sus compañeros la noche del 26 de septiembre del 2014, ya que en esa zona fueron atacados los normalistas.

Los manifestantes primero embistieron con las camionetas los accesos y muros de esas instalaciones, al no lograr ingresar de ese modo, les prendieron fuego a los tres vehículos que pretendieron utilizar de ariete.

Más tarde lanzaron petardos a los portones y lograron abrir uno de ellos, por lo que pudieron ingresar al inmueble, para causar algunos destrozos.

A raíz de las diferentes movilizaciones que los estudiantes de Ayotzinapa, principalmente, han realizado en ese lugar, se construyeron jardineras de concreto al frente del Palacio de Justicia, y se han reforzaron los muros, ventanales y portones de acceso, sin embargo aún así lograron ingresar.

IGUALA, GUERRERO, 27SEPTIEMBRE2025.- Un contingente conformado por madres y padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa, miembros de la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México (FECSM) y una representación de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG) arribaron a la ciudad de Iguala con el objetivo de realizaron un mitin en las estelas de luz en honor a los estudiantes caídos la noche del 26 y madrugada del 27 de septiembre del 2014. Reclamaron que la sociedad los ha tachado de vándalos y revoltosos, sin embargo,

Cuando los normalistas lanzaban petardos al edificio del Poder Judicial de Justicia, un grupo de personas desconocidas empezaron a lanzar piedras a los autobuses de los normalistas, quienes observaban la actividad de los manifestantes.

Antes, en el último día de la jornada de protestas, los estudiantes arribaron a la zona industrial de Iguala, frente a las llamadas Estelas de Luz, levantadas en memoria de Julio César Mondragón, estudiante que fue encontrado sin vida en ese lugar el 26 de septiembre del 2014.

Ahí, los familiares colocaron ofrendas florales antes de continuar hacia la calle Álvarez y el Periférico Norte, donde también fueron asesinados Daniel Cruz Gallardo y Julio César Ramírez Nava.

Los padres de los 43, en cada punto del recorrido insistieron en su demanda: verdad y justicia.

Al hacer uso de la palabra, Melitón Ortega, vocero del movimiento, reconoció la solidaridad de la ciudadanía durante todos estos años, pero cuestionó que durante la megamarcha del 26 de septiembre en la Ciudad de México, tanto el gobierno federal como el capitalino limitaran el acceso al Zócalo.

Los padres y madres de los 43 fueron enfáticos al reiterar su compromiso con seguir en pie de lucha en busca de sus hijos, y en la exigencia al Ejército Mexicano para que haga entrega de los 800 folios, que aseguran contienen información importante para saber qué pasó con sus hijos.