Ciudad de México, México.– La madrugada de este martes, un grupo de activistas de Greenpeace México sorprendió a los guardias de seguridad de la Estela de Luz al comenzar a escalar el monumento como parte de una acción directa para exigir la protección de la Selva Maya, uno de los ecosistemas más importantes del país.
El inicio de la protesta

Alrededor de las 5:20 de la mañana, cerca de 30 ambientalistas llegaron al sitio. Nueve de ellos iniciaron el ascenso para desplegar una manta de 26 metros con el mensaje:
“La Selva Maya grita, Semarnat sálvala”.
Mientras tanto, otro grupo acordonó la base del monumento y mostró pancartas con mensajes sobre la grave deforestación que sufre la región.
“La selva arde”
Carlos Samayoa, coordinador de la campaña México al grito de Selva de Greenpeace, advirtió que en los últimos cinco años se han perdido más de 300 mil hectáreas de selva, lo que representa más de lo deforestado en dos décadas previas.
“Estamos hablando del pulmón más importante de México y el segundo más grande de la región, devastado por la industria inmobiliaria, hotelera, ferroviaria y otras actividades que avanzan con el consentimiento de las autoridades”, denunció.
Autoridades permiten la acción

Bomberos de la Ciudad de México llegaron al lugar, pero al constatar que los escaladores contaban con equipo y capacitación, autorizaron que continuaran la protesta sin poner en riesgo su seguridad.
En paralelo, más de 100 policías y rescatistas acordonaron la zona para evitar incidentes.
Tras casi cinco horas de protesta, los activistas descendieron luego de acordar una reunión con funcionarios de la Semarnat, donde insistirán en la creación de un plan integral para frenar la deforestación.
Aunque inicialmente se planteó aplicarles una sanción con base en la Ley de Cultura Cívica por ingresar a un área restringida, el Gobierno capitalino confirmó que no habrá cargos, ya que no se causaron daños al monumento.

Con esta acción, Greenpeace busca visibilizar la urgencia de proteger la Selva Maya, considerada un tesoro ambiental que enfrenta una de las peores crisis de devastación en la historia reciente.