El comandante regional de la Policía Estatal en la zona Norte, Mariano Dorantes Bernal, fue asesinado a balazos en la comunidad de Ocotito, perteneciente al municipio de Chilpancingo, Guerrero.
De acuerdo con los primeros informes de fuentes de seguridad, el mando policial fue sacado por la fuerza de su domicilio alrededor de las 15:30 horas por sujetos armados.
Minutos después, vecinos reportaron disparos de arma de fuego en la colonia Cuauhtémoc de dicha localidad.
Tras el reporte, elementos de la Policía Estatal y de la Guardia Nacional se movilizaron hasta la calle Las Flores, donde localizaron al comandante sin vida dentro de una camioneta, con impactos de bala.
El área fue acordonada por personal ministerial para la realización de las diligencias correspondiente.
Posteriormente, el cuerpo fue trasladado al Servicio Médico Forense para la práctica de la necropsia de ley.
Hasta el momento, las autoridades no han informado sobre personas detenidas ni sobre el móvil del ataque.
Crimen no ‘descansa’ en Chilpancingo
El ataque se registró en plena temporada vacacional y a pesar del despliegue de 9 mil 200 elementos de las diferentes corporaciones de seguridad de los tres órdenes de seguridad y el reforzamiento de la videovigilancia en las principales ciudades, que anunció la mañana de este lunes el gobierno del estado para protección de turistas y habitantes de la entidad para este fin de año.
Como parte de ese refuerzo de seguridad se encuentra la llegada de por lo menos 150 elementos de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana del gobierno federal que arribaron a Chilpancingo para resguardar esta capital, como parte del operativo vacacional de fin de año.