Celaya, Guanajuato.- Aunque cada año ha ido en aumento el número de denuncias por extorsión, en enero pasado sólo se abrieron 10 carpetas de investigación por este delito. Mientras que en enero del 2023 se interpusieron 19 denuncias de extorsión; y en el mismo mes del 2022 fueron 6.
A decir de las autoridades no es que incremente el número de extorsiones, sino que aumenta la denuncia de los ciudadanos. Sin embargo, muchas personas no denuncian por miedo a represalias.
Las denuncias en la Fiscalía General del Estado por el delito de extorsión incrementaron en el 2023 un 68.7 %, en relación con el 2022.
De enero a diciembre del 2023 se interpusieron 194 denuncias por el delito de extorsión contra 115 que se hicieron en el 2022, lo que representa un incremento del 68.7 por ciento. El aumento en las denuncias ha incrementado año con año.
El 2022 cerró con 115 denuncias por extorsión, el doble de personas que denunciaron ser extorsionadas en todo el 2021, año en el que se denunciaron únicamente 56 casos.
Mientras que en todo el 2020 sólo se abrió una carpeta de investigación por ese delito.

Lo anterior según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública que reúne las estadísticas de las denuncias presentadas en la Fiscalía General del Estado, sin embargo, los comerciantes, micro, medianos y pequeños empresarios piden que no solo aumenten las denuncias, sino que en verdad disminuya el delito y dejen de cobrarles “derecho de piso”.
Sin embargo, de unos cuatro años a la fecha se ha notado el abandono de algunos locales, oficinas y edificios en la zona centro de Celaya y avenidas principales, en donde anteriormente estaban instalados negocios prósperos que prefirieron cerrar para evitar ser extorsionados y por el temor a ser víctimas de algún ataque.
En Celaya una gran cantidad de negocios han sido afectados por las extorsiones, desde aquellos donde se generaban grandes ingresos hasta establecimientos reconocidos y prósperos o que ya eran lugares tradicionales.
Este delito también ha alcanzado los sitios populares como mercados o tianguis, en donde los delincuentes les cobran a los comerciantes de acuerdo a como estiman son sus ganancias, pero todos pagan, hasta el que vende el producto más pequeño o incluso las hierberas.
Sin embargo, no todos denuncian ser víctimas de la extorsión, algunos optan por pagar y otros sólo cierran su negocio.
Más noticias de Celaya