TEXTUAL. “Ni las intimidaciones, ni las amenazas, tienen cabida en una democracia en donde lo que se debe privilegiar es el respeto a las personas, las ideas, las leyes y las instituciones. Rechazo cualquier tipo de violencia hacia las personas que integramos las autoridades electorales”.

CONTEXTO. Así lo escribió la consejera presidenta del Instituto Estatal Electoral, Brenda Canchola Elizarraraz en su cuenta de X el pasado sábado. No es habitual que la titular del IEEG escriba en esta red social. La más reciente ocasión que había emitido un mensaje propio (y no una republicación) y por eso es destacado que lo haya hecho.

LO QUE FALTÓ. El problema es que su mensaje no tenía destinatario. Consulté a través de Germán León, coordinador de Comunicación Social del IEEG si podía preguntar a Brenda Canchola a quién se refería en su mensaje porque es evidente que la referencia es a un acontecimiento reciente.

LOS ALCANCES. No hubo respuesta. Desde luego que no estaba obligado a ello. Pero sería conveniente que la presidenta del IEEG clarificara ese mensaje porque es delicado que la titular del organismo responsable de llevar a buen puerto el proceso electoral, hable de intimidaciones y de amenazas.

LA DUDA. ¿Quién ejerce, contra quien en particular y de qué tipo de violencia habla Brenda Canchola?

ENTORNO. Para el IEEG que encabeza ella no cabe duda que ha sido un proceso harto complejo y eso que falta todavía un mes de campañas, la jornada electoral del 2 de junio y el período postelectoral.

INSUFICIENCIAS. El organismo tiene varios flancos abiertos. Morena ha insistido en un árbitro electoral parcializado y que está del lado del partido en el poder. Un señalamiento que es impreciso por un hecho muy simple: este consejo electoral ha mostrado en varios momentos la confrontación de posturas y estilos que han provocado votaciones divididas.

COLOFÓN. El problema del IEEG es que llegó a esta elección con una ley electoral insuficiente que es corresponsabilidad de los partidos políticos que no hicieron su tarea. Esa no es su culpa de origen pero su obligación sacar adelante el proceso con los elementos que hoy tiene.

LA DEL ESTRIBO…
En lo que fue la única entrevista que ha dado en las últimas semanas, el gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo hizo una confesión interesante: “las ambulancias que sirven al crimen organizado”, a propósito del asesinato de 2 paramédicos.

La pregunta es qué hizo el gobierno estatal y/o la Fiscalía para remediar o atacar este vínculo. Incluso, Diego Sinhue dijo que pediría a la secretaría de Salud retomar la verificación de hospitales que atienden o sirven al crimen organizado.

¿Qué ha pasado entonces en todos estos años con la revisión de la autoridad a estos vínculos?

 

CLAUDIA SHEINBAUM: A UN AÑO DE LA PRIMERA VISITA A GUANAJUATO

“Hay muchos mitos y mala información sobre la relación de Morena con los empresarios”.

Eso dijo hace exactamente un año Claudia Sheinbaum en la única visita que tuvo con el perfil y agenda de suspirante a la candidatura presidencial de Morena a Guanajuato. Ya había estado en la entidad pero con visitas institucionales en donde no se mezclaba la agenda del gobierno y la de la disfrazada precampaña.

El apunte hacia la relación de Morena con el sector empresarial en realidad se ha modificado muy poco porque así lo ha propiciado el propio partido político.

El empresariado de Guanajuato, nadie puede negarlo, tiene un vínculo natural con Acción Nacional porque fue ese sector el que alimentó la rebelión en el estado desde finales de los ochentas en torno al PRI como partido casi único en Guanajuato.

De ahí surgieron cuadros que alimentaron el plan de gobierno del panismo en el poder (remember Guanajuato Siglo XXI, Sojo, Flores Alcocer, Carlos Medina) y la estrategia llevada a la acción de gobierno de los consejos ciudadanos, perdura hasta nuestros días con defectos y virtudes.

No es casual que un empresario emblemático como Hugo Villalobos González quien fue el primer presidente ciudadano del IEEG, el que encabezó esfuerzos como El Zapotillo y otras tantas causas, no partidistas pero sí en afinidad con el panismo gobernante, sea hoy, la voz ciudadana que aparece con las dirigencias de PRI, PAN y PRD a favor de Xóchitl Gálvez.

Hace un año exacto, Sheinbaum encabezaba un desayuno en León al que fueron convocados empresarios pero al que no fueron ninguno de los conocidos, ni liderazgos a quienes no les importa aparecer en la foto con suspirantes panistas, con el gobernador en turno o con la próxima candidata presidencial azul pero sí con quien se perfilaba como la abanderada de la 4T.

Por eso, el tono de su discurso hacia el panismo gobernante en Guanajuato, fue suave; entendible y natural pero destacado cuando solemos escuchar desde el morenismo diatribas, rayos y centellas en contra de los gobiernos y las estrategias locales.

Ricardo Sheffield Padilla, todavía procurador federal del Consumidor, logró su cometido de ser el único candidateable de Morena a la gubernatura en Guanajuato, citado por Sheinbaum en sus eventos y presente en primera fila con ella y que le acompañó en la camioneta en el traslado de Haciendas El Refugio al Poliforum.

A un año de distancia y en plena campaña presidencial, las cosas no han variado mucho.

Claudia sigue punteando la carrera presidencial y Sheffield tiene el control en Morena Guanajuato pero también, se mantiene esa distancia entre el morenismo y el empresariado porque ambas instancias se han replegado y han reforzado sus posturas.

Morena tendría que tomar la iniciativa para no reforzar la convicción sobre los mitos de su fobia a los empresarios que después de lo del desaire a Coparmex, son más realidad que nunca.

 
 

BOTELLO IMPUGNA ANTE EL TEEG Y CULPA… A MORENA

La exalcaldesa Bárbara Botello Santibáñez impugnó ante el Tribunal Estatal Electoral de Guanajuato el rechazo a su registro como candidata a diputada plurinominal de Morena. Eso no es sorpresa porque estaba claramente perfilado. Lo que no estaba en el script es que en su recurso responsabilizara a los representantes de su partido y quienes definieron las

A través de un Juicio para la Protección de los Derecho Político Electorales del Ciudadano, Botello y Verónica García Barrios, integrantes de la fórmula 3 por acción afirmativa indígena, alegan presuntas omisiones del IEEG, por la falta de notificación personal a ambas; de la representación de Morena ante el IEEG por no notificar de manera cierta y fehaciente los requerimientos de la autoridad y el acuerdo mismo emitido por el consejo del IEEG el pasado 26 de abril.

Pero lo más interesante: “la omisión o falta de acuerdo del Partido Morena, donde se haya determinado que la postulación a la posición 3 de la lista sea para la acción afirmativa indígena y que dicho acuerdo lo hayan notificado personalmente a las suscritas”.

Adicionalmente, Botello y García Barrios reclaman “la actuación fuera de norma, en violación al principio de legalidad por parte de la Secretaría Ejecutiva del IEEG”, Indira Rodríguez al prejuzgar sobre el contenido y alcances jurídicos de los documentos presentados para el registro de candidaturas de conformidad con el artículo 190 de la Ley de Instituciones y Procedimientos Electorales para el Estado de Guanajuato.

En la página 4 del documento, en el apartado “Antecedentes de la Resolución”, las impugnantes señalan que en el recibo de comprobante de recepción de solicitud de registro de candidaturas, del IEEG del 17 de Abril del 2024, no se señala que la posición 3 donde quedan registradas sea de la acción afirmativa indígena”.

“Lo mismo señalamos para la constancia de SNR (Sistema Nacional de Registro de Candidatos y Precandidatos), donde solo indica que vamos en la posición 3 de la lista, pero no señala que esa posición sea de la acción afirmativa indígena.

Lo mismo sucede en la lista de diputados locales del principio de representación proporcional en el Estado de Guanajuato, que emitió la Comisión Nacional de Elecciones del Partido Morena, donde vamos en la posición 3, sin embargo tampoco dice que esa posición es de la acción afirmativa indígena”, agrega el documento.

Botello señala en el documento 9 agravios entre ellos la presunta violación a artículos constitucionales en relación al principio propersona, violación a leyes electorales por parte de Morena, violación a los lineamientos del registro de candidaturas, falta de fundamentación y motivación y violencia política en razón de género.

Llama la atención que en su recurso, Botello no intenta justificar la validez de su candidatura como acción afirmativa indígena sino que advierte presuntas fallas del IEEG y de la representación de Morena que la habrían dejado en estado de indefensión y de la no notificación oportuna del propio partido.