La Unión Europea tiene la atención puesta en lo que ocurre en el mar Caribe y el océano Pacífico, ante la destrucción de presuntas narcolanchas y la ejecución de sus tripulantes a manos de militares estadounidenses.

De cara a la IV Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños-Unión Europea (Celac-UE), que tendrá lugar en Santa Marta, Colombia, los próximos 9 y 10 de noviembre, altos funcionarios de la UE aseguraron que la cooperación en la lucha contra el crimen organizado transnacional y la seguridad ciudadana serán temas prioritarios, que se reflejarán en los debates de la sesión plenaria.

Los oficiales europeos –que solicitaron ser referidos de esa manera– anticiparon que, al ser asuntos de suma importancia, habría una declaración no vinculante, un “texto político” que pondría énfasis en la importancia de la cooperación en seguridad, justicia y el desafío de abordar conjuntamente el crimen transfronterizo y los flujos ilícitos de droga.

En ese sentido, sostuvieron que la Unión Europea “está siguiendo muy de cerca la situación en el Caribe y en el Pacífico”, en referencia a los ataques letales que fuerzas armadas de Estados Unidos están dirigiendo contra embarcaciones presuntamente cargadas de droga, operativos que ya arrojan un saldo de al menos 64 personas asesinadas de manera extrajudicial.

Sin querer adelantar si habrá un posicionamiento específico a ese respecto –porque la declaración conjunta es “un documento vivo” que aún se está negociando y todavía no está firmada–, señalaron que por parte de la UE hay “un llamado al diálogo” para que se dé “una desescalada de cualquier tipo de conflicto”.

Establecieron que, si bien la Unión Europea comparte el objetivo de desmantelar las redes del crimen transnacional y su modelo de negocio –pues son una amenaza en ambos lados del Atlántico–, plantean que esta lucha conjunta debe conducirse respetando el derecho internacional y los principios de integridad territorial y soberanía.

Al margen de si habrá una postura institucional al respecto, acotaron que estos últimos conceptos están en la Carta de Naciones Unidas y la Unión Europea los defiende.