Guanajuato, Gto.- El Hijo del Santo, uno de los íconos más grandes y respetados de la lucha libre mexicana, anunció oficialmente su retiro de los cuadriláteros con una gira de despedida que recorrerá tres ciudades: Monterrey, Guadalajara y la Ciudad de México. Sin embargo, muchos aficionados guanajuatenses se preguntan si el legendario enmascarado podría incluir alguna función en el estado antes de colgar definitivamente la máscara.
Durante la conferencia de prensa donde dio a conocer los detalles de su retiro, el luchador de 63 años aseguró que esta decisión no responde a una pérdida de pasión, sino a su deseo de cerrar su carrera “con dignidad y el corazón en alto”. El gladiador, quien suma más de cuatro décadas de trayectoria, reveló que su última lucha será el 13 de diciembre en el Palacio de los Deportes, aunque reconoció que aún podría realizar apariciones especiales en el futuro.
En Guanajuato, donde la lucha libre tiene una base sólida de seguidores, especialmente en ciudades como León, Irapuato y Salamanca, los rumores sobre una posible presentación no han cesado. Si bien no forma parte de la gira oficial —que contempla únicamente Monterrey, Guadalajara y la capital del país—, el propio Hijo del Santo ha dejado entrever su interés en agradecer al público del Bajío por su apoyo a lo largo de los años.
“No descarto visitar otras plazas después de mi retiro. Guanajuato siempre me ha recibido con cariño, y si el tiempo lo permite, podría regresar, aunque ya no como competidor”, declaró el enmascarado en entrevista reciente.
El Hijo del Santo suma gran cantidad de logros
Con una carrera que suma más de 50 máscaras ganadas, títulos mundiales en distintas divisiones y combates históricos ante figuras como el Perro Aguayo, Eddy Guerrero y Silver King, el Hijo del Santo se despide dejando un legado imborrable en la historia del pancracio mexicano.
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Aunque no está confirmado un combate en tierras guanajuatenses, la posibilidad de que el “Heredero de la Leyenda de Plata” se presente para convivencias, homenajes o exhibiciones sigue latente, especialmente tras la cercanía emocional que mantiene con su afición en el estado.
“Los héroes pueden morir, pero las leyendas son eternas. Mientras alguien crea en el bien, en el esfuerzo y en la fuerza del corazón, El Santo seguirá vivo”, expresó el luchador al anunciar su despedida.
Por ahora, Guanajuato deberá esperar para saber si tendrá la oportunidad de ver al Hijo del Santo subir una última vez al ring, o al menos recibirlo en una gira de agradecimiento que cierre con broche de plata uno de los capítulos más gloriosos de la lucha libre mexicana.