Guanajuato, Guanajuato.- Luego de participar en la sesión extraordinaria del Consejo de Protección Civil, el presidente de la Asociación de Bomberos del Estado de Guanajuato, Juan Antonio Quiroga Lozano, informó que los bomberos de las 36 estaciones ubicadas en los municipios del estado se mantienen en alerta ante el incremento de los niveles de cuerpos de agua, canales, drenes y ríos, aunque hasta este momento no representan un riesgo para las zonas habitadas.

“Las acciones que se realizan en este momento son preventivas. La reunión fue para informar sobre el estatus del tiempo. No hay nada grave por ahora, solo estamos al pendiente de la situación, pero dependerá de cuánto llueva. Estamos en precontingencia, en espera de cualquier situación, reforzando las guardias y pidiendo a todo el personal que esté disponible para atender una emergencia. El canal oficial de la información es Protección Civil del Estado, en coordinación con Comunicación Social del Gobierno del Estado. A nivel bomberos, en este momento no hay alguna situación grave en el estado, pero sí estamos atentos”, señaló.
Explicó que en este momento dependen de las condiciones del tiempo.
“Aquí el que manda es Dios. Todo dependerá de las lluvias que caigan en la parte alta de la cuenca, en el Estado de México y en la parte norte de Guanajuato, ya que la cuenca del río Laja afecta a Celaya, Villagrán y hasta Salamanca, donde se une con el Lerma”.
Respecto al nivel del río Lerma, que comienza a preocupar a la población de Salamanca porque atraviesa el centro de la ciudad, mencionó:
“Se registró un incremento en su nivel desde ayer viernes y hoy sábado, pero se está manteniendo. Eso es señal de que no ha aumentado más por el momento. Sin embargo, se mantiene el monitoreo cada tres horas. Actualmente su nivel es de 3.70 metros, y su capacidad es de cinco metros; todavía tiene un colchón de más de un metro”.

Quiroga Lozano llamó a la población a no acercarse a las orillas y a reportar cualquier situación de inundación al sistema de emergencias 911. Concluyó señalando que puede haber dificultad si llueve fuerte en la ciudad, porque si el río está muy lleno no se alcanza a desfogar rápidamente. Esto se debe a que hay que rebombear el agua, y ese proceso requiere tiempo, ya que los cárcamos funcionan precisamente por rebombeo.