“El huipil del Istmo de Tehuantepec y su bordado tradicional son expresiones culturales que representan identidad, historia y diálogo intercultural”, señaló la dependencia en un comunicado difundido por redes sociales y medios estatales, acompañando su mensaje con una palabra contundente: ¡PLAGIO!
La prenda en cuestión —un top con bordado floral en colores vivos como rojo, rosa, amarillo, verde y azul— se comercializa en la plataforma de SHEIN como parte de una línea “étnica” que, según Seculta, reproduce de manera industrial los bordados característicos del huipil istmeño, sin autorización ni reconocimiento a las comunidades de origen.

“La imitación industrial de estos diseños sin reconocimiento ni autorización representa una amenaza a la preservación de estas prácticas y una forma de apropiación cultural”, denunció Seculta.
Las autoridades estatales advirtieron que la apropiación de elementos culturales sin el consentimiento de las comunidades originarias constituye una forma de explotación, en abierta vulneración a sus derechos colectivos.
¿Oaxaca puede demandar a SHEIN?

En su pronunciamiento, la Secretaría citó el Artículo 2º de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, que reconoce el derecho de los pueblos indígenas a conservar y enriquecer sus elementos culturales, incluidos sus conocimientos tradicionales y expresiones artísticas.
Seculta exhortó a la sociedad, empresas y consumidores a respetar y proteger las expresiones culturales originarias, reconociendo no solo su valor estético, sino también su historia, identidad y derecho a decidir sobre el uso de sus creaciones.
No es la primera vez: Adidas también fue acusada

Este nuevo caso de apropiación cultural se suma a otros episodios recientes. El pasado 11 de agosto, la empresa alemana Adidas fue duramente criticada por lanzar el modelo de calzado “Oaxaca Slip-On”, un par de huaraches industriales inspirados en el tradicional calzado zapoteco de la comunidad de Villa Hidalgo Yalálag.
Ante la presión pública y el pronunciamiento del Gobierno de Oaxaca, Adidas ofreció una disculpa oficial a través de la agencia AP, y expresó su intención de establecer un “diálogo respetuoso que honre el legado cultural” de la comunidad.
Tras el caso de Adidas, el gobernador Salomón Jara Cruz sostuvo un encuentro con artesanas y artesanos de Yalálag, junto con el alcalde Eric Ignacio Fabián y la titular del Instituto Nacional del Derecho de Autor (Indautor), Karina Luján, para acordar acciones legales y culturales en defensa del patrimonio colectivo.
Gracias a esta gestión, Adidas suspendió la promoción del calzado, reconoció públicamente su error y aceptó colaborar con las autoridades para evitar nuevos casos.