Estados Unidos.- El primer ministro de Ontario, Doug Ford, volvió a estar en el centro de la polémica internacional. Esta vez, su imprudencia política provocó una auténtica crisis comercial: el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció el fin inmediato de todas las negociaciones con Canadá tras acusar a las autoridades de Ontario de difundir un video “fraudulento y falso” con la voz del expresidente Ronald Reagan.

El anuncio fue hecho la noche del jueves en la red social Truth Social, donde Trump escribió: “Basándome en su atroz comportamiento, TODAS LAS NEGOCIACIONES COMERCIALES CON CANADÁ QUEDAN TERMINADAS”. Según el mandatario estadounidense, la provincia canadiense habría gastado 75 millones de dólares en una campaña publicitaria que tergiversó las palabras de Reagan para atacar la política arancelaria de Estados Unidos y manipular decisiones de la Corte Suprema.

El video, difundido el 16 de octubre por el propio Ford en su cuenta de X, muestra imágenes de ciudades y trabajadores estadounidenses mientras se escucha la voz del expresidente Reagan criticando los aranceles a las importaciones. En el mensaje, Reagan advertía que esas medidas “solo funcionan por un corto tiempo” y que “a largo plazo perjudican a todos los trabajadores y consumidores estadounidenses”.
La Fundación Ronald Reagan denunció de inmediato el uso indebido del material, calificándolo como “fraudulento y falso”. Trump citó este comunicado para justificar la ruptura comercial, lo que generó un terremoto político en Ottawa y Toronto.

Esta no es la primera vez que Doug Ford lanza ataques polémicos hacia el extranjero. En noviembre pasado, el líder conservador pidió expulsar a México del T-MEC, acusando al país de ser “una puerta trasera” para productos chinos que, según él, dañan la economía canadiense y estadounidense. Paradójicamente, ahora sus acciones han puesto en riesgo la permanencia de Canadá en el tratado que une a las tres naciones.
La decisión de Trump llega a menos de tres meses de la revisión del T-MEC
La decisión de Trump llega a menos de tres meses de la revisión del T-MEC, lo que añade una capa de tensión a las relaciones entre los tres países de América del Norte. Hasta el momento, el primer ministro de Canadá, Mark Carney, no ha emitido una respuesta oficial, aunque recientemente declaró que su país busca diversificar sus exportaciones ante las políticas proteccionistas de Estados Unidos.

Con su campaña fallida, Doug Ford no solo ha revivido viejas heridas diplomáticas, sino que ha provocado una ruptura histórica que podría tener consecuencias económicas profundas para Canadá y para la estabilidad del comercio en América del Norte.
