Guanajuato, Gto.- En la calle subterránea Miguel Hidalgo, una de las vialidades más emblemáticas de Guanajuato capital, permanecen desde hace años unas viejas vigas de madera que alguna vez sostuvieron un pequeño cuarto —probablemente un baño— perteneciente a una de las viviendas asentadas sobre la histórica arteria.

El cuarto colapsó hace tiempo, dejando únicamente las vigas como vestigio de aquella estructura. Sin embargo, tras años de exposición a la intemperie, la madera ha comenzado a ceder por efecto de la humedad y el peso, lo que representa un riesgo evidente para los peatones que transitan diariamente por la zona.
Ante el deterioro, los propietarios del inmueble al parecer optaron por una solución improvisada, muy a la usanza mexicana, sujetar las vigas con cuerdas para evitar su caída. La medida, lejos de brindar seguridad, genera preocupación entre quienes transitan por el lugar.

“Es un peligro, seguramente ya se iban a venir abajo y por eso las quisieron asegurar con esa cuerda, pero mejor sería que las quitaran ya por completo y así no hay el riesgo de que se vengan abajo… Luego no hay avisos ni nada de que hay peligro ahí… la gente pasa como si nada y si no voltea uno para arriba, no se da uno cuenta, ya nomás cuando le caiga el tronco a uno en la cabeza” comentó un transeúnte.
Aumenta la sensación de inseguridad
El inmueble al que pertenecen las vigas muestra varios espacios interiores expuestos a la vista pública, lo que aumenta la sensación de inseguridad al pasar por el sitio.

Este lugar se encuentra en pleno centro histórico, a escasos metros del Mercado Hidalgo y del acceso al túnel donde inicia el Festival del Día de Muertos por lo que en la zona hay una afluencia de peatones y visitantes muy nutrida.

